Existe la equivocada creencia de que todas las aves carecen de grasa y que son el alimento ideal, a la hora de ponerse a régimen o controlar el peso. Es cierto algunas aves como el pavo especialmente en lo que concierne a la pechuga tiene menos grasa que cualquier otra ave. Pero el pato y el ganso son aves que tiene mucha grasa, así que quizá debas limitarlas en tu alimentación.
De las aves es importante consumir las partes blancas, la pechuga especialmente porque tienen poca grasa, lo que no sucede en las partes oscuras donde concentran mucha grasa. Es importante que si se comen se haga al vapor, asadas, rostizadas, pero retirando el pellejo a la hora de comer, si se sirven con acompañamientos que sean verduras, y aprovechar a que como no tienen mucho hierro obtenerlo de vegetales frescos como la espinaca.
Al asarlas aderezarlas con una pizca de sal, quizá un poco de limón y especies naturales, no uses aderezos comerciales que están llenos de grasa, y deja que se asen lentamente porque así no se resecan pero sí pierden mucho de la grasa.
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